Desde hace siete meses, la Avenida 9 de Julio no ha sido cortada por protestas. Sin embargo, hoy, grupos de piqueteros comenzaron su marcha pasadas las 10 de la mañana, replicando la manifestación en diversas ciudades del país. Exigen una audiencia con la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello. El Ministerio de Seguridad desplegó un operativo para evitar que se interrumpa la circulación en las principales avenidas.
Los manifestantes de izquierda se oponen a las políticas del gobierno, que según ellos, afectan especialmente a los sectores más vulnerables. La marcha forma parte de una “jornada federal de lucha” en la que exigen una “Argentina sin hambre, con paz, justicia social y soberanía”. Los organizadores presentarán una solicitud para una reunión urgente con la ministra Pettovello y con Juan Bautista Ordóñez, secretario de Niñez, Adolescencia y Familia.
La protesta se realizará en tres etapas, con la Ciudad de Buenos Aires como epicentro. Desde las 10 de la mañana, las columnas de manifestantes, agrupadas bajo el movimiento Territorios en Lucha, se concentraron frente al antiguo Ministerio de Desarrollo Social, en Moreno y Lima. Una hora después, se unieron a otros grupos reunidos en Avenida Belgrano y 9 de Julio, y a las 13 horas, partirán hacia Plaza de Mayo.
Aunque circulaban por las veredas, en las avenidas 9 de Julio y de Mayo se generaron demoras debido a los esfuerzos de los agentes de tránsito y la Policía Federal por ordenar la circulación y evitar el corte del tráfico.
Territorios en Lucha, organización que no incluye al Polo Obrero, agrupa a diferentes movimientos, entre ellos Libres del Sur, Movimiento Argentina Rebelde (MAR), Movimiento 29 de Mayo, el Frente Popular Darío Santillán, y otros más. También participan de la marcha las columnas del Polo Obrero, encabezadas por Eduardo Belliboni, quien enfrenta un juicio por presuntos delitos de “administración fraudulenta” y “extorsión”, que podrían implicar penas de hasta 15 años de prisión.
La manifestación representa un nuevo desafío al protocolo antipiquetes implementado por el Ministerio de Seguridad, dirigido por Patricia Bullrich, quien ha asegurado que las fuerzas federales velarán por el cumplimiento de la normativa para garantizar el orden público.
La última vez que se intentó cortar la Avenida 9 de Julio fue en abril, pero las fuerzas de seguridad lograron dispersar a los manifestantes. Desde entonces, no se ha interrumpido el tráfico en esta arteria central de la ciudad.
Silvia Saravia, referente de Libres del Sur, defendió la movilización: “Es urgente la unidad para frenar el desastre social y económico que está provocando Milei. Su gobierno ha atacado áreas clave como la educación, la salud y los salarios, y especialmente a los jubilados. Protestamos para que no sigan invisibilizando el trabajo de miles de personas que sostienen comedores comunitarios en barrios humildes. El Estado debe cumplir con su deber”. Además, destacó: “Bajo el lema ‘la patria no se vende’, buscamos visibilizar nuestra lucha por una Argentina libre de hambre y de políticas de ajuste”.
Antes de llegar a Plaza de Mayo, el Polo Obrero y otros movimientos piqueteros realizaron una radio abierta en el Obelisco. La columna de Belliboni llevará una bandera que reclama “Paro general y plan de lucha para derrotar a Milei”.
El día anterior, un grupo de estas organizaciones se concentró en La Matanza, en Buenos Aires, para exigir alimentos para los comedores comunitarios y un bono de emergencia de $100.000. El acto culminó en la plaza de San Justo, frente al Palacio Municipal.
El líder piquetero mencionó: “Marchamos contra el hambre que genera el gobierno de Milei. Exigimos un bono para quienes no tendrán celebraciones en estas fiestas y un aumento en los programas sociales, como el Potenciar Trabajo, que sigue congelado desde diciembre pasado”.
La movilización también refleja la fractura dentro del Frente Nacional Piquetero, tras el procesamiento de Belliboni y otros dirigentes del Polo Obrero. En un comunicado, organizaciones como la Coordinadora Sindical Clasista y otros sindicatos combativos denuncian los ataques del gobierno a los trabajadores, jóvenes y mujeres, y critican la pasividad de los sindicatos tradicionales ante las políticas de ajuste.
Celeste Fierro, diputada del MST-FITU, también participa de la protesta. “Vamos a hacer una radio abierta en el Obelisco y luego marcharemos hacia Plaza de Mayo. Es necesario un verdadero plan de lucha y un paro general para enfrentar el ajuste de Milei”, dijo. Además, señaló que la dirigencia sindical debe dejar de ser cómplice del gobierno y defender los derechos de los trabajadores.
Para los piqueteros, esta jornada de protesta refleja un creciente descontento social y busca presionar al gobierno para cambiar las políticas que consideran perjudiciales para los sectores más vulnerables.