Sergio Orlando Leiva, conocido como “El Negro Sombra”, fue asesinado a tiros en la localidad de El Talar de Pacheco, partido de Tigre. El exlíder de una peligrosa banda dedicada a los secuestros extorsivos y otros delitos violentos fue hallado gravemente herido en un pasillo de la Villa San Pablo y, aunque recibió asistencia médica, no logró sobrevivir. La principal hipótesis apunta a un enfrentamiento vinculado al narcotráfico.
Últimos momentos y la investigación en curso
En un video grabado por testigos del hecho, se observa a Leiva explicando dónde había sido herido mientras aguardaba auxilio. Minutos después, falleció a causa de las lesiones. Según las primeras investigaciones, dos hombres, identificados por testigos como “Beldes” y “Huevito”, estarían implicados en el crimen. Las autoridades analizan imágenes de cámaras de seguridad y recolectan testimonios para dar con su paradero.
Agentes de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (SubDDI) de Tigre y la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Descentralizada de El Talar encabezan la pesquisa. Si bien se realizaron allanamientos en la zona cercana a una capilla en la Villa San Pablo, los sospechosos lograron escapar antes del arribo de las fuerzas policiales.
Un prontuario marcado por el crimen organizado
Leiva fue una de las figuras más temidas del mundo delictivo en Argentina, con un historial delictivo que incluyó secuestros extorsivos y homicidios. A lo largo de su carrera criminal, acumuló ocho condenas en distintas jurisdicciones, totalizando 101 años de prisión. En 2016, el Tribunal Oral Federal N°1 de San Martín unificó su pena en 34 años, con cumplimiento en el penal de Senillosa, Neuquén.
Sin embargo, en abril de 2019, obtuvo la libertad condicional tras ser beneficiado por un fallo del mismo tribunal, que argumentó su buena conducta. Desde entonces, residía en Tigre y portaba una tobillera electrónica, aunque sin restricciones de movimiento.
El secuestro que marcó su carrera criminal
Uno de los episodios más emblemáticos de su prontuario fue el secuestro de Ernesto Rodríguez, padre del empresario Jorge “Corcho” Rodríguez, en febrero de 2004. La víctima estuvo cautiva durante 43 días, mientras la banda exigía un rescate de 900.000 dólares. Finalmente, un operativo policial en una quinta de San Andrés de Giles permitió su liberación sin que se concretara el pago. Durante el enfrentamiento, dos agentes del Grupo Halcón resultaron heridos y dos secuestradores murieron. Leiva fue condenado a 15 años de prisión por este hecho.
El crimen de “El Negro Sombra” deja en evidencia la violencia que persiste en algunos sectores del conurbano bonaerense, donde las disputas por el control territorial y el narcotráfico siguen cobrando vidas. Mientras tanto, la Policía continúa con los operativos para dar con los responsables de su asesinato.