Bajo un fuerte hermetismo, la Secretaría de Cultura trabaja en la nueva etapa del parque ubicado en Villa Martelli. Podrían darle un perfil más comercial y se desconoce si se mantendrá su actual estructura. Los números de la auditoría.
Los planes que el Gobierno de Javier Milei tienen para el parque Tecnópolis son, por ahora, un secreto que pocos funcionarios conocen. En la Secretaría de Cultura que conduce el productor de obras teatrales Leonardo Cifelli manejan la información sobre el tema a cuentagotas y solo aseguran que se trabaja para darle una nueva impronta a la megamuestra gratuita que impulsó el kirchnerismo en 2011.
De inmediato aclaran que el parque no se va a cerrar ni se convertirá en un negocio inmobiliario. Dicen, por el contrario, que a diferencia de lo que ocurre actualmente, abrirá todo el año. Hoy Tecnópolis recibe a sus visitantes entre julio y noviembre de cada año y luego sostiene actividades menores por fuera de la muestra de ciencia y cultura. “Nuestra intención es aprovecharlo y hacerlo rentable”, sueltan en el Gobierno.
“Hoy abre cuatro meses al año, el resto de los meses está cerrado, obsoleto, vacío y genera muchos gastos de mantenimiento que pagamos todos, eso lo vamos a cambiar”, sueltan en despachos oficiales.
A modo de ejemplo, señalan que, pese a la inactividad actual de buena parte del parque, quedó en trámite un servicio integral de seguridad privada y control de admisión y permanencia en Tecnópolis por un total de $349 millones, además de otra prestación de mantenimiento de instalaciones eléctricas por unos casi $13 millones. Son solo dos de las contrataciones activas.
Así las cosas, en el Gobierno trabajan en la nueva impronta que tendrá el parque y que según se pudo saber está vinculada a que Tecnópolis tenga un perfil más comercial y reciba una mayor cantidad de actividades privadas, conciertos y recitales que generen un mayor flujo de dinero. Se especula con espacios rentados para empresas y convenciones, aunque los detalles del nuevo Tecnópolis se mantienen en reserva.
Lo que nadie se anima a decir es qué ocurrirá con la actual temática del parque. Desde su fundación hasta aquí, Tecnópolis tuvo una impronta educativa, a través de la que se buscaba acercar la ciencia y la tecnología a millones de personas, en particular a los jóvenes. En el Gobierno son herméticos respecto de esta cuestión, es decir, si el parque cumplirá las mismas funciones que hasta ahora o si esas ofertas quedarán descartadas de plano de cara a lo que viene.
La relación entre Milei y el mundo de la Cultura es tensa. El Gobierno le bajó rango al Ministerio de Cultura y lo convirtió en una Secretaría. En la primera versión de la Ley de Bases intentó derogar el Instituto Nacional del Teatro y el Decreto Ley 1224 que constituyó el Fondo Nacional de las Artes. Tras fuertes críticas declinó de ambas ideas, pero impuso fuertes restricciones presupuestarias.
La última auditoría sobre Tecnópolis arrojó una deuda millonaria en servicios de limpieza y mantenimiento
Al igual que ocurrió con toda la administración nacional, los gastos de Tecnópolis están en la mira. La última auditoría que se realizó sobre el parque arrojó una deuda por, al menos, $126 millones en el pago de los servicios de aire acondicionado, fumigación, limpieza, limpieza de tanques, alquiler de equipamiento audiovisual, seguridad, entre otros.
La cuestión es analizada de cerca por la subsecretaría Legal y Técnica de Capital Humano que conduce Leila Gianni y el asesor Ariel Romano, a cargo de la gran mayoría de las denuncias penales que se han formulado desde este Ministerio por supuestas irregularidades durante la gestión anterior. Ambos siguen de cerca estos números y monitorean posibles irregularidades.
Además, se detectaron otras irregularidades como organismos que usaban espacios dentro del predio con convenios vencidos; falta de un sistema de detección de incendios y sistema de agua para mitigar el fuego; obras en construcción dentro del parque paradas desde 2022 como la de los sanitarios del Polo Productivo, entre otras anomalías.
En esta nueva etapa, la Casa Rosada buscará darle un giro a la impronta del parque. Sostienen que el kirchnerismo -tanto en la gestión de Cristina Kirchner como de Alberto Fernández- hicieron que Tecnópolis “sea un ejemplo de cómo se gastó de mala manera la plata” y buscarán impulsar, en una primera instancia, propuestas de la Secretaría de Cultura los sábados, domingos y feriados. Luego se completaría la grilla con nuevas actividades que se anunciará en las próximas semanas. Esa ronda de actividades tendría – a su vez- un horizonte comercial que permita el ingreso de dinero al parque.
En el Gobierno de Milei la estética y el mensaje cultural que se brinda en cada acto son detalles a los que los principales asesores del Presidente le dan importancia. Tecnópolis será de alguna manera un predio a través del que el Gobierno comunicará, tal como lo hará en el acto que se prepara para el Pacto de Mayo, nombre con el que se conoce al acuerdo nacional que se firmará con gobernadores en la Ciudad de Córdoba. Tal como adelantaron los periodistas Manuel Jove e Ignacio Salerno, el Gobierno buscará colocar columnas romanas y le entregará condecoraciones (órdenes de Mayo al mérito) a cada participante.
(TN)