Luego de que el Gobierno Nacional ratificara en las últimas horas que no moverá el feriado del lunes 20 de noviembre, la oposición presentó este martes un proyecto de declaración en la Cámara de Diputados en el que volvieron a solicitar su traslado a fin evitar el ausentismo en el balotaje, en el que competirán Sergio Massa y Javier Milei el domingo previo.
El pedido fue realizado por los legisladores de Juntos por el Cambio, Hernán Lombardi y Cristian Ritondo, quienes propusieron cambiar el día no laborable al 27 del mismo mes. Lo hicieron acusando al oficialismo de “querer que vote poca gente” y alegando que la modificación es posible dado que ya se hizo en la segunda vuelta electoral del 2015, cuando se enfrentaron Mauricio Macri y Daniel Scioli.
En el documento presentado, además, los diputados hicieron mención a la solicitud realizada días atrás por la Cámara Nacional Electoral, la cual le pidió expresamente a las autoridades que evalúen el traslado del feriado para garantizar la asistencia plena de la ciudadanía a los comicios. Esta, sin embargo, fue desestimada.
En este contexto, el proyecto introduce: “Este año se cumplen 40 años del regreso de la democracia, un hecho histórico para la vida política y social de los argentinos, que significó la recuperación de los derechos, deberes y garantías. El derecho a votar, no solo constituye una enorme responsabilidad, sino también un compromiso de la sociedad con el sistema democrático”.
Y agrega, sobre la última vez en la que sucedió un hecho similar: “Cabe mencionar, además, como antecedente el último balotaje celebrado en nuestro país en el año 2015, donde Mauricio Macri y Daniel Scioli se disputaban la presidencia aquel domingo 22 de noviembre y un día después era feriado por el Día de la Soberanía Nacional. El entonces Jefe de Gabinete Aníbal Fernández, comunicó el cambio de fecha del feriado nacional, argumentando que tal medida estaba destinada a garantizar la concurrencia de todos los ciudadanos”.
A diferencia de aquella oportunidad, esta vez el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, explicó que “no resulta apropiado dictar un decreto de necesidad y urgencia para alterar las disposiciones vigentes referidas al feriado que nos ocupa”. Asimismo, reseñó en una carta que los ciudadanos siempre han sabido compatibilizar la obligación electoral con sus otras actividades.
A partir de la postura tomada por el Gobierno -firme en no realizar ninguna modificación del calendario- desde la oposición acusan que están buscando “que vote poca gente”. En este sentido, Hernán Lombardi señaló: “Buscan su conveniencia por encima de la participación”.
El escrito presentado este martes por los legisladores, finalmente concluye: “Por los motivos expuestos y entendiendo el impacto positivo que tendría para el sistema democrático facilitar la normal concurrencia de los argentinos a las urnas, es que solicito a mis pares el acompañamiento al presente Proyecto de Declaración”.
De acuerdo a lo asegurado por el Ministerio de Turismo de la Nación, en un fin de semana de tres días, como el del 20 de noviembre, lo normal es que viajen entre 600 mil y 3 millones de personas.
Para este caso esperan una menor actividad turística, debido al impacto del balotaje de las elecciones presidenciales, pero no deja de ser un tema que preocupa, sobre todo después del bajo nivel de presentismo que se registró en las elecciones del pasado 22 de octubre.
Según manifestó la Dirección Nacional Electoral, en la última elección participó 77,6% del padrón, lo que significó el segundo nivel más bajo desde el retorno de la democracia en 1983. También había sido bajo el presentismo en las PASO, cuando sólo votó 70,4% de la población habilitada.
Elevaron un reclamo administrativo para pedir el traslado del feriado
La Fundación Apolo también hizo una petición para modificar el calendario de la semana del balotaje a través de un reclamo administrativo ante el Poder Ejecutivo Nacional, en el cual solicitaron el corrimiento del feriado del día 20 de noviembre hacia el 24.
El documento fue dirigido a Alberto Fernández y señala que, el hecho de que esta vez no sea tenido en cuenta, abre suspicacias sobre la posibilidad de que la acción del gobierno esté regida según la conveniencia del candidato oficialista de turno.
Además, postula que es “contradictorio” que se imponga la ley que prohíbe la venta de bebidas alcohólicas antes de los comicios para que los ciudadanos no evadan sus obligaciones cívicas y que no se proponga el feriado que fomenta escapadas turísticas.
(Infobae)
