En una tremenda final la Academia venció 3 a 1 a Cruzeiro y entre llanto y emoción volvió a gritar campeón internacional. El escobarense Bruno Zuculini ingresó en la segunda parte.
Alegría y enorme emoción por Avellaneda. Después de 36 años de sequía y desilusión, Racing Club volvió a sonreír a nivel Sudamericano y se consagro ganador la la actual Copa Sudamérica.
El equipo del gran Gustavo Costas jugó una final a la altura, se imponía con justicia 2 a 0, le tocó sufrir con el descuento de Cruzeiro y sobre el final Roger Martínez sentenció el partido y decretó la locura en Avellaneda y en cada corazón blanquiceleste.
El gran Bruno Zuculini, jugador nacido en Loma verde, tierra escobarense y fanático de la Academia, ingresó cuando faltaban 35 minutos y jugándose la vida en cada pelota, dejando el corazón en la cancha pudo sacarse esa espina y darle un título ansiado a este sufrido Racing Club.
Felicitaciones a todo el pueblo de la Academia por nunca dejar de soñar y luchar por sueño de volver a ser campeones de un torneo internacional.