Se trata de una iniciativa que busca regularizar las deudas interjurisdiccionales y avanzar hacia un saneamiento de las cuentas provinciales.
Según explicó el Vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán, este mecanismo tiene como propósito simplificar y resolver las relaciones económicas y financieras entre la Nación y las provincias, marcadas históricamente por conflictos cruzados y asimetrías derivadas de un centralismo creciente.
El régimen propone la extinción total o parcial de las obligaciones recíprocas mediante compensaciones, conciliaciones, transacciones, reconocimientos y remisiones. De este modo, busca ordenar las finanzas públicas, saldar deudas acumuladas en años previos y establecer una nueva relación fiscal federal más equilibrada.
En un comunicado, el gobierno nacional destacó el rol del titular de Economía, Luis Caputo, y de la Vicejefatura de Gabinete del Interior liderada por Catalán, en la articulación de este régimen. La semana pasada, Caputo, Catalán, y otros funcionarios del área económica y fiscal, como Carlos Guberman, Javier Milano y Valeria Sánchez, llevaron a cabo reuniones con gobernadores como Raúl Jalil (Catamarca), Leandro Zdero (Chaco), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Sergio Ziliotto (La Pampa) y Osvaldo Jaldo (Tucumán). Durante estos encuentros, las provincias firmaron cartas de intención que formalizan su adhesión voluntaria al régimen.
Entre las jurisdicciones que ya expresaron su interés en participar se encuentran Catamarca, Chaco, Entre Ríos, La Pampa y Tucumán, junto con otras como Chubut, Córdoba, Corrientes, Jujuy, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Esta adhesión masiva subraya el interés de los gobiernos provinciales en alcanzar soluciones definitivas a las deudas recíprocas y avanzar hacia un nuevo modelo de administración fiscal.
(Foto: Border Periodismo)