El delantero escobarense Nicolás González, una de las figuras de la selección argentina, protagonizó un momento memorable durante las celebraciones de fin de año de su equipo, la Juventus. En una faceta poco conocida, el oriundo de Belén de Escobar sorprendió a todos con una interpretación en vivo de “El farsante”, un éxito del puertorriqueño Ozuna, demostrando que su talento no se limita a los campos de juego.
El evento tuvo lugar en la tradicional cena navideña del club, donde jugadores y cuerpo técnico aprovecharon para fortalecer los lazos grupales antes de encarar los desafíos deportivos de 2025. Sin embargo, el momento de la noche llegó cuando González, alentado por sus compañeros, tomó el micrófono y subió al escenario. Su pareja, Paloma Silberberg, registró el momento y lo compartió en redes sociales con la frase: “Mi cantante favorito”.
La actuación desató una ovación entre los presentes y dejó en claro que el escobarense no solo es pieza clave dentro del equipo, sino también un personaje carismático fuera de la cancha. Incluso el director deportivo del club, Cristiano Giuntoli, bromeó al respecto: “No te vayas a lesionar subiéndote a la silla”, en alusión a los problemas musculares que Nicolás ha enfrentado en el pasado.
Con 26 años destaca en su primera temporada con la Vecchia Signora. Ha jugado ocho partidos, anotado dos goles y dado dos asistencias, consolidándose como un futbolista esencial tanto para el equipo italiano como para la selección argentina.
Su presente deportivo es brillante, pero en Escobar no olvidan sus raíces. Cada actuación del delantero, ya sea marcando un gol o cantando en una celebración, se vive como un triunfo compartido por toda la comunidad. Sin dudas, Nico González es un ejemplo de cómo el talento y la humildad pueden llevar a alguien lejos sin perder de vista su origen.