Bruno era un perro de raza Weimaraner que se destacó como rastreador en la brigada canina de la Municipalidad de Escobar. A lo largo de su carrera, participó en más de 280 casos, colaborando con fuerzas de seguridad de Argentina y otros países.
Falleció Bruno, un hermoso perro que en su vida trabajó en cientos de casos como rastreador, tanto en Argentina como en otros países. Vivía en Ingeniero Maschwitz, incluso tras su retiro.
Tenía 12 años y había sufrido un ACV. Era atendido con mucho amor por sus cuidadores Diego Tula y Raquel Peralta.
Entre los casos más resonantes en los que intervino se encuentran el femicidio de Anahí Benítez (2017), cuando Bruno fue clave en la investigación, ayudando a localizar el cuerpo de la joven en la reserva Santa Catalina de Lomas de Zamora; la búsqueda de Kimey Ferreyra de Moraiz (2018): El niño de 3 años había desaparecido en San Francisco Solano. Bruno, junto a su guía Raquel Peralta, rastreó su rastro hasta una vivienda en la que fue encontrado sano y salvo; o la búsqueda de Juan Pedro Blavesich (2021): Un hombre de 87 años con Alzheimer se perdió en la Laguna de Lobos. Bruno y su compañero Candy fueron fundamentales para localizarlo con vida.
La historia de Bruno resalta la importancia de los perros de trabajo en la seguridad y el bienestar de la comunidad, demostrando cómo su entrenamiento y dedicación pueden marcar la diferencia en situaciones críticas.