Mientras la inseguridad sigue descontrolada en el Conurbano bonaerense y el gobierno provincial mira para otro lado, un nuevo hecho de violencia sacudió a los vecinos de Morón. Un trabajador fue asaltado a punta de pistola cuando llegaba a su casa, en un hecho que quedó registrado por las cámaras de seguridad y que vuelve a poner en evidencia la impunidad con la que actúan los delincuentes.
El robo ocurrió el viernes alrededor de las 18:30 en la intersección de las calles Intendente Agüero y Charcas. La víctima, que volvía de su jornada laboral, estacionó su camioneta Volkswagen Amarok color beige cuando fue interceptada por dos delincuentes armados que descendieron de un Renault Clio gris. Sin darle tiempo a reaccionar, lo amenazaron y le apuntaron a la cabeza para que bajara del vehículo.
Uno de los delincuentes, vestido con una camiseta de fútbol con el número 7, gorra roja y bermudas negras, fue quien lo encañonó, mientras que su cómplice, con campera negra con una franja blanca y pantalón negro, lo cacheó en busca de objetos de valor. Acto seguido, se subieron a la Amarok y huyeron a toda velocidad, dejando abandonado el Renault Clio con el que habían llegado.
Horas después, la camioneta apareció en González Catán, partido de La Matanza, otra de las zonas castigadas por el avance del delito. Sin embargo, los delincuentes lograron escapar y, hasta el momento, no hay detenidos. La investigación está en manos de la Fiscalía Nº1 de Morón, a cargo de María Silvana Morini, y de la Policía Bonaerense, que analiza las cámaras de seguridad y realiza peritajes en el vehículo recuperado para tratar de dar con los responsables.
Mientras tanto, la realidad sigue golpeando a los bonaerenses. La inseguridad se multiplica y la sensación de indefensión crece día a día, sin que desde la Gobernación haya respuestas concretas para frenar esta ola de violencia. Los vecinos de Morón, como tantos otros en el Conurbano, siguen expuestos al accionar delictivo sin que parezca haber voluntad política de enfrentar el problema.
