Diez estudiantes del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) se consagraron campeones mundiales en la competencia aeroespacial CanSat 2025, organizada por la NASA y otras entidades internacionales de alto prestigio. Es la primera vez que un equipo latinoamericano obtiene el primer puesto en esta exigente competencia, que simula el ciclo completo de una misión espacial real.
El certamen se desarrolló del 3 al 9 de junio en Virginia, Estados Unidos, y reunió a 40 universidades de todo el mundo. El equipo argentino, integrado por jóvenes de diversas carreras de ingeniería, diseñó, construyó y lanzó un satélite miniatura del tamaño de una lata, capaz de transmitir datos en tiempo real, grabar video aéreo y medir variables ambientales desde una altura de 700 metros.
“Tenemos un equipo que abunda en creatividad, conocimiento y persistencia”, destacó Santiago Bolzicco, líder del grupo.
Durante el lanzamiento, el satélite desplegó sus aspas y descendió controladamente como un helicóptero, mientras enviaba información que fue captada en tierra por una estación receptora operada por los propios estudiantes. El desempeño fue evaluado por expertos de la NASA y otras instituciones aeroespaciales, quienes validaron su excelencia técnica.
El proyecto, iniciado en enero como una actividad extracurricular, fue totalmente autogestionado. Si bien el prototipo fue financiado por la universidad, el viaje se logró gracias al apoyo de la Cancillería, Marca País y sponsors privados, ya que muchos de los integrantes están becados.
“Nos apasiona la temática aeroespacial. Esto nos sirve muchísimo para nuestras carreras y para el futuro”, expresó Daniela Maradei, integrante del subgrupo de estructuras y materiales.
El equipo del ITBA no solo cumplió con todas las exigencias del certamen, sino que superó a universidades de Estados Unidos, Turquía y México, logrando la mayor puntuación general. La experiencia dejó aprendizajes técnicos y humanos que marcan un antes y un después en la formación de estos jóvenes talentos.
Desde Belén de Escobar celebramos este logro como un símbolo de lo que los estudiantes argentinos pueden alcanzar con esfuerzo, creatividad y compromiso.