La empresa manifestó que se deben a “problemas técnicos” y “tareas de mantenimiento”, pero lo cierto es que los cortes perjudicaron a miles de usuarios del servicio.
Los apagones comenzaron el lunes, y continuaron el martes y el miércoles, afectando un área comprendida entre la avenida Tapia de Cruz y los barrios que se ubican al norte de la misma, hasta Loma Verde, donde Edenor también cortó el suministro a la Cooperativa Escobar Norte, y también abarcó a manzanas del centro de Belén y cercanas a la terminal de colectivos.
Edenor explicó que “salió de servicio una línea de transmisión de energía (132 kV y 500 kV), que afectó no solo a Escobar sino también a otros distritos como San Martín, La Matanza e Ituzaingó”.
Este jueves también volvió a cortarse el servicio a media mañana, y se restableció alrededor de las 13, pero ya había afectado la actividad normal de comercios, entidades bancarias y administración pública.
Algunos usuarios que realizaron reclamos por falta de suministro se sorprendieron ante la respuesta de la empresa, en la que indicaban que se trataba de un corte programado por tareas de mantenimiento, ya que no habían sido notificados de forma alguna.
Por lo que se pudo averiguar, la empresa desplegó sus cuadrillas y estuvieron trabajando en la subestación N°4, que se encuentra en cercanías al centro de Belén.
Todo comenzó el lunes por la noche, cuando, alrededor de las 21 horas se averió una línea de media tensión, que tuvo a algunos barrios sin luz hasta nueve horas.
Los vecinos manifestaron, además de los inconvenientes surgidos naturalmente ante un corte de luz, que al momento de volver el servicio quemó varios electrodomésticos por la diferencia de tensión. Además, cuestionaron que, si en otoño ocurren ya estos inconvenientes, en invierno podría ser peor por el aumento del consumo.
