Murió Roberto Giordano, el emblemático peluquero de los famosos

Ocurrió en el Sanatorio Mater Dei de la Ciudad de Buenos Aires. Vivía en Punta del Este y llegó al país para realizarse una cirugía por un cambio de marcapasos. Tenía 75 años.


Giordano fue el peluquero y peinador de numerosas figuras como Valeria Mazza, Andrea Frigerio, Pampita, Nicole Neumann, Dolores Barreiro. En los años 90 fue un referente del mundo de la moda. Durante esos años, sus desfiles se destacaron como un clásico de la temporada de verano en Punta del Este, con presentaciones en otras ciudades costeras como Mar del Plata y Pinamar.

Desde hacía más de cinco años estaba instalado en Uruguay, donde incluso había estado trabajando como peluquero del hotel Conrad. Giordano había llegado al país para realizarse una cirugía que consideraba menor.

Roberto Giordano murió a los 75 años (Verónica Guerman/Teleshow.com)

Los últimos años de Roberto Giordano, entre clases de peluquería vía Zoom y el reconocimiento de la gente

Roberto Giordano estaba instalado en Punta del Este, decisión que tomó después de la pandemia, junto a Silvia, su esposa; su hijo, Luciano, y sus nietas, Pía y Laura, aunque era residente uruguayo desde hacía más de dos décadas.

Siempre fanático de Boca, aseguraba que su vida en el país vecino era apacible: daba clases de peluquería a través de Zoom, hacía gimnasia y colaboraba en comedores comunitarios.

Además, se mostraba orgulloso del cariño y el reconocimiento que recibía en la capital uruguaya de parte de la gente y aseguraba que no extrañaba su vida en nuestro país, ni los grandes desfiles que llegaron a contar con figuras internacionales como Alain Delon, Sofía Loren, Robert De Niro, Jean Claude Van Damme.

Roberto Giordano junto a Pampita, una de las figuras que impulsó los populares desfiles.

Cómo fue la caída de Roberto Giordano tras ser el “rey de los desfiles y el glamour de los 90”

En agosto de 2009, la jueza Julia Villanueva declaró la quiebra de la empresa de Roberto Giordano. Esta decisión fue solicitada por varios acreedores, entre ellos la AFIP y diversas organizaciones del sector de la peluquería, como la Federación Nacional de Trabajadores de Peluquería, Estética y Afines y el Sindicato de la actividad. La medida marcó un punto crítico en la carrera de Giordano, quien había sido un empresario exitoso con una red de franquicias de peluquerías tanto en Argentina como en el extranjero.

Giordano, conocido por sus espectaculares desfiles de moda en Punta del Este, como en Mar del Plata, Pinamar y en diferentes puntos del país, había logrado posicionar su marca en los principales centros comerciales del país. Su casa central se encontraba en el barrio porteño de Palermo, en la calle Güemes. Sin embargo, a pesar de su éxito inicial, enfrentó serios problemas económicos que culminaron en la intervención judicial de sus negocios.

Roberto Giordano en uno de sus tantos desfiles en los que contaba con figuras internacionales como Alain Delon, Sofía Loren, Robert De Niro, Jean Claude Van Damme.

En diciembre de 2002 las autoridades allanaron 16 de sus peluquerías en el marco de una investigación por presunta evasión impositiva y facturación en negro. Este episodio fue un golpe significativo para la imagen del empresario, quien había sido una figura prominente en el mundo de la moda y la televisión, con eventos que atraían a personalidades como Diego Maradona, Susana Giménez y Mirtha Legrand.

El sistema de franquicias que Giordano había desarrollado fue una de las claves de su expansión, permitiéndole establecer una presencia notable en el mercado de la belleza. Sin embargo, las dificultades financieras y las acusaciones legales erosionaron su imperio, llevando finalmente a la declaración de quiebra.

En mayo de este año Giordano había sido condenado a 3 años de prisión por insolvencia fraudulenta tras declararse culpable de ocultarle bienes a la justicia y pactar un juicio abreviado. La causa tenía una fuerte carga probatoria contra el otrora peluquero de las estrellas. En el expediente se acumularon documentos y testimonios que lo complicaban, y mucho. Por esto, no tuvo más remedio que declararse culpable y evitar una pena mayor.

(Infobae)

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