La vicepresidente de la Nación, Victoria Villarruel, quedó en el centro de la polémica tras quejarse públicamente del salario que percibe como titular del Senado, en el marco del decreto que congela las dietas de los senadores hasta marzo. Sus declaraciones desataron una ola de críticas, encabezadas por el dirigente social Juan Grabois y la diputada oficialista Lilia Lemoine, quienes cuestionaron duramente su postura.
El líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) no dudó en ironizar sobre la situación. “Dejá de llorar y renunciá, Videlina. Algo vas a conseguir en el sector privado, capaz te pagan tres chirolas”, lanzó Grabois en sus redes sociales, utilizando un apodo que alude a las posturas de Villarruel respecto a la última dictadura militar. Además, sugirió posibles ocupaciones para la vicepresidente: “Modelo de botas o abogada de genocidas”.
Por su parte, Lemoine, diputada del bloque La Libertad Avanza (LLA), sorprendió al respaldar las críticas de Grabois, con quien mantiene marcadas diferencias ideológicas. “No me obligues a darte like, lpmqtrmp”, comentó la legisladora en tono jocoso, generando una inesperada coincidencia entre ambos opositores de Villarruel.
La controversia se desató tras una publicación de Villarruel en Instagram, donde informó haber firmado el congelamiento de dietas para los senadores. Sin embargo, sus declaraciones generaron indignación al afirmar: “Gano menos que el Presidente, los diputados, los jueces, y así puedo seguir. No alcanza a nadie que viva de su sueldo con honestidad”.
Además, Villarruel apuntó contra el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, por haber otorgado un aumento del 70% a los diputados en 2023. “Digamos la verdad, por favor. Mi sueldo está congelado hace un año, en breve me pagan dos chirolas”, aseguró, en referencia al vocero presidencial Manuel Adorni, quien también fue mencionado en sus críticas.
Lemoine, sin embargo, no dejó pasar la oportunidad de exponer una aparente contradicción en las palabras de Villarruel. “Martín y yo cobramos lo mismo”, aseguró, adjuntando un recibo de sueldo donde figura un monto cercano a los 4 millones de pesos. “No puedo creer que la vice se queje por ganar lo mismo que Menem o Adorni. Qué vergüenza”, agregó.
Por el momento, tanto Martín Menem como Manuel Adorni evitaron pronunciarse al respecto. Mientras tanto, la disputa dentro del oficialismo y las críticas desde la oposición mantienen en el ojo de la tormenta a la vicepresidente, cuyas quejas salariales continúan alimentando un encendido debate público.