Un tribunal de Corrientes sentenció a Brenda Miño a prisión perpetua por el asesinato de su hijo de cuatro años, cuyo cuerpo fue hallado enterrado en un descampado de Paso de los Libres. Sin embargo, la condenada podrá cumplir los primeros años de su pena bajo arresto domiciliario, hasta que su otra hija alcance los cinco años de edad.
Miño, de 20 años, fue hallada culpable del homicidio de su hijo Nahitan, un niño que padecía diversas discapacidades físicas. A pesar de la gravedad del caso, la mujer optó por no declarar durante el juicio. Sus defensoras oficiales, María Susana Ferreyra y María Soledad Fresneda, ya anticiparon que apelarán el fallo ante Casación.
Un crimen que conmocionó a Paso de los Libres
El asesinato ocurrió entre el 23 y el 25 de enero de 2023. Un mes después, en febrero, el cuerpo del menor fue descubierto en avanzado estado de descomposición por perros que deambulaban por un descampado cercano al barrio Las Flores.
La autopsia determinó que la causa de la muerte fueron múltiples golpes en la cabeza. Según la investigación llevada adelante por el fiscal Facundo Sotelo, la madre aprovechó la vulnerabilidad del niño, quien padecía escoliosis dorsolumbar, luxación congénita de cadera y luxación de codo con desplazamiento anterior, para acabar con su vida y deshacerse del cuerpo entre los matorrales.
La identificación del niño se produjo gracias a la intervención de su abuela, quien reconoció la ropa que llevaba puesta al momento del hallazgo. La mujer declaró que el 20 de enero su hija había llevado a Nahitan al Hospital San José, pero regresó sin él. En aquel momento, Brenda le aseguró que había entregado al pequeño a una asistente social por no poder brindarle los cuidados que necesitaba. Sin embargo, esa versión se derrumbó ante la falta de pruebas y las inconsistencias en su testimonio.
Prisión perpetua con arresto domiciliario temporal
Los testimonios de vecinos fueron clave en el juicio. Según sus declaraciones, la madre no atendía adecuadamente a Nahitan, lo descuidaba y no lo higienizaba con la frecuencia necesaria. A partir de estas evidencias, el Tribunal integrado por los jueces Manuel Pardo, Marcelo Fleitas y Gustavo Ifran resolvió condenarla a prisión perpetua por homicidio calificado por el vínculo.
Pese a la severidad de la condena, los magistrados determinaron que Miño cumpla los primeros años de la pena en arresto domiciliario, con monitoreo electrónico, hasta que su hija menor alcance los cinco años. Luego, deberá ser trasladada a una penitenciaría de Corrientes para continuar con su condena en prisión efectiva.