Desde este jueves entra en vigencia una nueva resolución de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) que eleva considerablemente los montos a partir de los cuales los comercios deben identificar a sus clientes. Ahora, cualquier operación hasta $10.000.000 en efectivo o con otros medios de pago ya no será reportada automáticamente al fisco.
La medida forma parte del «Plan de Reparación Histórica de los Ahorros de los Argentinos», impulsado por el Gobierno nacional para facilitar el blanqueo de capitales no declarados y reactivar la circulación de dinero en la economía formal.
¿Qué cambia a partir de ahora?
📌 Nuevo límite de identificación del consumidor final:
Ya no será obligatorio informar al fisco los datos del comprador si la operación es menor a $10 millones, sin importar el medio de pago. Hasta ahora, los topes eran de $250.000 para efectivo y $400.000 para otros medios.
📌 Facturación simplificada para monotributistas:
Se amplía a $500.000 el monto permitido para usar la herramienta “Facturador”. Antes el tope era más bajo y generaba restricciones para pequeños contribuyentes.
📌 Monotributistas sociales:
Los registrados en el programa de economía social podrán emitir facturas simplificadas solo por operaciones de hasta $250.000.
Estos cambios buscan simplificar las operaciones comerciales y reducir el umbral que dispara alertas fiscales automáticas, como ocurría hasta ahora con compras medianas o pagos en efectivo.
¿Esto significa que el fisco no controla más?
No exactamente. Aunque los movimientos por debajo del nuevo límite no generan reportes automáticos, siguen estando sujetos a controles puntuales por parte de organismos como la Unidad de Información Financiera (UIF), en caso de detectar operaciones sospechosas vinculadas al lavado de activos o financiación del terrorismo.
Además, algunas actividades quedaron exentas directamente de reportes: como compras personales con tarjeta o billeteras virtuales, operaciones notariales, compra-venta de autos, expensas y servicios públicos.
¿Cuál es el objetivo?
El Gobierno apunta a que los ahorros “debajo del colchón” vuelvan a circular. La simplificación de los regímenes de información busca alentar el uso del efectivo y el ingreso voluntario de capitales al sistema sin el miedo al castigo fiscal.