Nueva estafa por mail: un simple clic puede vaciar tu cuenta bancaria en segundos

La advertencia fue emitida por especialistas en ciberseguridad y confirmada por la empresa DNSFilter, que detectó que 1 de cada 644 clics en enlaces de desuscripción dirigía a un sitio malicioso.

Los delincuentes digitales envían correos que aparentan ser legítimos, con logos, tipografías y diseños que imitan a marcas reales. Al final del mensaje, colocan el clásico enlace para “cancelar suscripción”. Pero al hacer clic, el usuario es redirigido a una página falsa que solicita datos personales, claves bancarias o instala programas maliciosos (malware) sin que el usuario lo note.

En algunos casos, el objetivo es obtener credenciales bancarias. En otros, verificar que la dirección de correo está activa, para luego continuar enviando más estafas o incluso intentar suplantar tu identidad.

  • Robo de contraseñas y claves bancarias.
  • Instalación de malware que puede espiar tu actividad o robar archivos.
  • Uso de tu dirección de correo en otras estafas.
  • Mayor exposición a fraudes futuros.

Además, si tu celular o computadora no tienen un antivirus actualizado o un sistema de seguridad robusto, el simple hecho de visitar el sitio trampa puede dejarte expuesto sin que te des cuenta.

Los expertos en seguridad recomiendan:

  • Evitar hacer clic en enlaces de “cancelar suscripción” si el correo es sospechoso, tiene errores ortográficos o viene de direcciones desconocidas.
  • Acceder a los servicios siempre desde el navegador, ingresando manualmente la dirección web oficial.
  • Mantener actualizados el sistema operativo, el antivirus y las aplicaciones.
  • Activar la verificación en dos pasos en servicios bancarios y revisar periódicamente los movimientos de tu cuenta.
  • Utilizar filtros de spam y servicios con protección DNS, que bloquean sitios peligrosos automáticamente.

La ingeniería social detrás de esta modalidad está diseñada para engañar al ojo desprevenido. Por eso, cada acción dentro de tu casilla de correo debe hacerse con atención y criterio. Ya no alcanza con confiar en lo que parece legítimo: hoy, más que nunca, la seguridad digital empieza por uno mismo.

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