Argentina sumó un avance histórico en la lucha contra el cáncer de piel más agresivo. Ya está disponible Vaccimel, la primera vacuna terapéutica desarrollada en el país para pacientes con melanoma cutáneo en estadios tempranos. Es un hito científico que coloca al sistema biomédico local en la primera línea de la inmunoterapia oncológica.
El tratamiento —que solo se aplica con indicación médica oncológica y en centros especializados— marca el cierre de más de 30 años de investigación liderada por el prestigioso científico José Mordoh, referente del Conicet y figura central del Instituto Leloir.
Un desarrollo argentino con impacto global
Vaccimel nació a fines de los años 80, cuando Mordoh decidió centrar su trabajo en el melanoma, un tumor cutáneo de crecimiento rápido y elevada mortalidad en casos avanzados.
El proyecto avanzó con el apoyo de instituciones como la Fundación Instituto Leloir, el Instituto Alexander Fleming, el Hospital María Curie y la Fundación Sales, siguiendo la línea conceptual de figuras como César Milstein y Ralph Steinman, pioneros en inmunoterapia.
Tras décadas de investigación preclínica y ensayos en pacientes, la ANMAT aprobó la vacuna en 2021, permitiendo que el Laboratorio Pablo Cassará tomara la posta para producirla y distribuirla. Hoy ya se aplica oficialmente en el Hospital de Oncología María Curie y se están capacitando centros del interior para ampliar la cobertura.
Cómo funciona Vaccimel
A diferencia de las vacunas preventivas tradicionales, Vaccimel es terapéutica: está dirigida a personas que ya fueron diagnosticadas con melanoma y que tienen riesgo de recaída luego de la cirugía.
El tratamiento:
- No previene el cáncer, sino que entrena al sistema inmunológico para detectar y destruir células tumorales residuales.
- Utiliza una estrategia poli-antigénica, que presenta múltiples señales tumorales al sistema inmune para evitar que el melanoma genere resistencia.
- Activa a los linfocitos T CD8, células clave en la eliminación de tumores.
- Se aplica en 13 dosis durante dos años, con un esquema ambulatorio y poco demandante para el paciente.
Los ensayos clínicos muestran resultados alentadores:
casi el 70% de los pacientes tratados logra evitar recaídas, con efectos adversos mucho menores que las terapias tradicionales como el interferón.
Terapias celulares: el nuevo capítulo de la medicina argentina
Desde el Laboratorio Cassará destacan que Vaccimel forma parte de un proceso más amplio: el desarrollo de terapias celulares avanzadas.
Argentina lleva más de dos décadas trabajando en este campo y exporta insumos biotecnológicos a más de 100 centros especializados de Estados Unidos.
El siguiente paso del laboratorio será profundizar en terapias CAR-T, que consisten en:
- Extraer linfocitos del paciente.
- Expandirlos y modificarlos genéticamente para mejorar su capacidad de detectar y destruir tumores.
- Reintroducirlos en el organismo como “células de ataque” dirigidas.
Se trata de tecnologías de frontera que ya tienen aprobación en EE.UU. para leucemias y, más recientemente, para algunos tumores sólidos.
Melanoma: señales de alerta y prevención
Aunque suele asociarse al sol, el melanoma puede aparecer en zonas no expuestas: palmas, plantas, uñas o cuero cabelludo.
Sus características pueden variar mucho, lo que dificulta la detección.
Para reconocer lesiones sospechosas, los dermatólogos recomiendan la regla ABCDE:
- Asimetría
- Bordes irregulares
- Color variado
- Diámetro mayor a 6 mm
- Evolución: cambios en tamaño, forma, color o síntomas
La detección temprana es determinante: cuando se extirpa antes de que haga metástasis, las probabilidades de curación son muy altas.
Los factores de riesgo más importantes son la exposición solar intensa, piel clara, antecedentes familiares, numerosos lunares, edad avanzada e inmunosupresión.
