Se trata de la concesionaria Tolosa, quien había contratado internet y telefonía de Claro. Sin embargo, empleados municipales no permitieron la instalación. Ahora, la empresa atrasó los trabajos en la zona.
En una concesionaria de Colectora Este y Tapia de Cruz se generó una particular situación cuando un técnico de la empresa Claro llegó a instalar el servicio de internet y telefonía. Luego de charlar con el propietario del lugar y coordinar los detalles, salió al patio a comenzar el trabajo. Pero nunca lo terminó.
“Aparecieron a los veinte minutos dos motos y luego cuatro patrulleros y un despliegue de preventores. Cuando salgo el técnico me alertó que no lo dejaban trabajar. Pregunté por qué y me dicen que no se puede trabajar en la vía pública. Le digo ´me están perjudicando´ y me responden ´no, lo estamos ayudando, hay mucho robo de cables´. El tipo no sabía qué explicarme”, contó.
“Me dijo que debo pedir permiso antes. Pero esto no es nada trucho, es de Claro. Bajó luego uno de Inspección y reiteró que estaba prohibido. Nadie sabía explicarme. Deduje que eso es de manera lucrativa, aunque no me lo dijeron. ´Le vamos a secuestrar la camioneta al técnico porque está en infracción´. Me advirtieron, como si uno fuera un ladrón”, añadió Gabriel Valente, el comerciante en cuestión, dueño de Tolosa Automotores.
“Encima querían que les firme un papel. Me fui indignado. Esto además me perjudica porque sigo sin internet y teléfono, complicando el funcionamiento de nuestro trabajo”, agregó.