Un violento episodio de violencia de género terminó con un hombre muerto en la localidad bonaerense de San Francisco Solano, partido de Quilmes. El agresor, identificado como Rubén Cardozo, de 37 años, fue apuñalado por su hijastro de 12, quien lo sorprendió atacando ferozmente a su madre. Según confirmaron fuentes judiciales, el menor actuó en defensa propia y de su familia, y ya se encuentra nuevamente en su casa.
“Mi hermano hizo lo que tenía que hacer. Si yo hubiese estado ahí, también lo hubiera hecho”, aseguró Candela, hermana del chico, en diálogo con Radio Mitre. La joven relató el horror que vivieron ese miércoles por la mañana, cuando Cardozo irrumpió en la casa en evidente estado de ebriedad y se abalanzó sobre su pareja, María del Pino, quien dormía.
“Le dio una piña de una, sin mediar palabra. Mi mamá tiene un chichón enorme en la frente. La empezó a golpear sin parar, la estaba ahorcando, se estaba muriendo”, contó. Fue entonces cuando su hermano menor, que había escuchado los gritos, se levantó y se encontró con la escena.
Según la reconstrucción judicial, el chico corrió hacia la cocina, tomó un cuchillo y se abalanzó sobre el agresor para detener el ataque. Le asestó al menos tres puñaladas, una de ellas fatal. El padrastro soltó a la mujer, se desplazó unos metros hasta el frente de la vivienda y se desplomó desangrado.
Aunque el hombre tenía antecedentes por violencia familiar, y la madre del chico había denunciado agresiones en 2023, no existía ninguna restricción de acercamiento ni medida de protección vigente.
“Mi hermano está destruido. Lloró hasta quedarse dormido. Se siente culpable, aunque salvó la vida de nuestra mamá”, agregó Candela. “El daño ya está hecho, y fue el único que tuvo el coraje de intervenir”.
La causa está a cargo de la Fiscalía N°1 de Menores de Quilmes, que en principio entendió que se trató de un caso claro de legítima defensa. El arma utilizada fue hallada en la cocina, con rastros de sangre.
En la casa estaban también otros tres menores, además del niño que actuó. Todos presenciaron de alguna forma el violento episodio. El acusado compartía hijos con la mujer agredida, y era conocido por su comportamiento violento.
Las autoridades continúan investigando para determinar todos los detalles de lo ocurrido, aunque no se descarta que la causa quede archivada por la inimputabilidad del menor y el contexto de legítima defensa.
